20 de noviembre de 2025

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Argentina ante su propia oportunidad: el agro pide pensar en grande

El productor CREA Germán Weiss reclamó políticas estables, derribar paradigmas y aprovechar el crecimiento mundial de la demanda de alimentos.

Germán Weiss, productor agropecuario y miembro de los grupos CREA, dejó una reflexión profunda tras su participación en uno de los paneles del encuentro Connectagro organizado por la empresa Bayer. A la salida, destacó la importancia del espacio y el valor de reunir miradas diversas que integran la cadena. “Es un evento muy lindo, muy grande, donde podemos compartir toda la red, la cadena agroindustrial, las visiones compartidas, todas las oportunidades que nos muestra el mundo para poder seguir creciendo”, expresó.

Para Weiss, ese intercambio es fundamental para ampliar el impacto productivo del agro en todo el territorio. “Tenemos la posibilidad de generar mucha más producción, mucho más empleo, más dólares para el país, más desarrollo económico a lo largo y a lo ancho del país”, afirmó, convencido de que el sector puede aportar mucho más que lo que hoy se le permite.

Sin embargo, advirtió que las décadas de inestabilidad llevaron a que el productor empiece a pensar “en chico”. Lo dijo al recordar que Argentina suele conformarse con pequeñas variaciones en las exportaciones, sin una estrategia que apunte alto. “Sabiendo que Argentina puede ser el gran supermercado del mundo… 10 millones de toneladas más, 10 millones menos, pero sin pensar y generar estrategias que permitan que el país sea lo que debe ser”, sostuvo.

Weiss reforzó la idea con un dato que considera central. “El mundo creció un 50% en el consumo de carne, leche y granos en 20 años. Es muchísimo. Y Argentina prácticamente se quedó estancada en todas las producciones. No aprovechamos eso porque teníamos otra visión de país”, explicó. Para él, pensar en grande permitiría un salto cualitativo en producción, desarrollo y empleo. Recordó que más de 70.000 pymes agropecuarias trabajan con tecnología, innovación y mano de obra, y que podrían multiplicar su impacto si el país fijara objetivos claros.

Consultado sobre la falta de una estrategia nacional para el sector, fue categórico: “Lamentablemente hay una visión ideológica en la Argentina, muchos paradigmas establecidos de que el agro no genera empleo, de que no genera valor, de que no genera desarrollo”. Señaló que esos prejuicios condujeron a decisiones equivocadas durante décadas, mientras países vecinos eligieron caminos opuestos y demostraron su error. Agregó que, según el Foro Económico Mundial, la cadena agroindustrial será de las actividades que más empleo generará en los próximos diez años. “Más allá de la inteligencia artificial, va a ser una de las actividades que va a seguir dando empleo”, dijo.

En la entrevista también abordó la falsa división que durante años se instaló entre el Estado y el productor. “Siempre se creyó que el único perjudicado por las trabas, las retenciones o los cierres de exportaciones era el productor. Y eso es un error muy grande. Yo como productor seguí viviendo, pero mucha gente de mi pueblo no pudo maximizar su potencial”, afirmó. Para él, el costo del atraso productivo lo paga la comunidad, no el campo en sí mismo.

Weiss se mostró autocrítico tanto con la dirigencia como con los propios productores. “Tenemos que salir más a mostrar lo que hacemos. Yo estoy muy orgulloso de lo que hago y no tengo ningún problema en mostrarlo. Si tengo algo para mejorar, está muy bueno que me lo digan y lo mejoraré”, sostuvo. Agregó que quienes visitan los campos suelen sorprenderse al ver un sector dinámico, tecnificado y en permanente cambio.

Además, planteó que las gremiales agropecuarias deben comunicar mejor la profundidad del impacto que generan las crisis climáticas. Recordó los nueve meses de inundaciones en el centro-oeste bonaerense y la afectación generalizada. “En una inundación, el productor es el principal perjudicado, pero toda la red económica y social que existe alrededor de la producción agropecuaria también se ve afectada. Los pueblos están sufriendo muchísimo”, lamentó, al enumerar comerciantes, transportistas, albañiles, plomeros y múltiples actividades paralizadas por la caída de la producción.

Hacia el final dejó una frase que sintetiza su visión: “Pensando en grande, Argentina puede generar un impacto muy alto para el bienestar de todos los argentinos”. Y volvió a remarcar que el país tiene la obligación de corregir sus paradigmas y crear una política agropecuaria que trascienda gobiernos.