El invierno se instala tras el temporal: aire polar y fuerte contraste climático en la región núcleo.


Leo De Benedictis, meteorólogo de AZ Group, alertó por el ingreso definitivo de aire polar y la alta variabilidad climática de las próximas semanas

El violento temporal que azotó al norte de la provincia de Buenos Aires y zonas vecinas no sólo dejó un saldo de lluvias excepcionales, sino que marcó un quiebre en el patrón atmosférico. Así lo anticipó el meteorólogo Leo De Benedictis, de la consultora AZ Group, quien explicó que la circulación comenzó a modificarse y da paso a un escenario más frío, con características invernales bien definidas.

“Entre el último informe y el día de hoy pasaron muchas cosas, y se espera que también tengamos mucha variabilidad en los próximos días y semanas”, resumió De Benedictis en su habitual microclima. El especialista remarcó que el evento más destacado fue el gran temporal que castigó severamente al norte bonaerense, al sur de Santa Fe y sectores de Entre Ríos.

Según su análisis, este episodio de lluvias intensas actuó como un punto de inflexión: “Después del temporal cambió bastante la situación. Veníamos de una primera ola de frío, con características de aire polar, pero ahora se empieza a estabilizar un ambiente mucho más frío, típico del invierno”.

Este cambio coincide con la inminente transición hacia el mes de junio y, si bien se trata de un comportamiento estacional esperable, De Benedictis subrayó la rapidez con la que se produjo: “El contraste en poquitas semanas hace que todo parezca mucho más abrupto”, indicó.

En las zonas rurales, este nuevo panorama climático no es menor: el enfriamiento sostenido podría tener impactos en cultivos que aún resisten en pie tras el exceso hídrico, y marcará también el pulso de las decisiones agrícolas de cara a la próxima campaña fina.

De Benedictis concluyó con un mensaje a productores y técnicos: “Seguimos atentos, porque este patrón de alta variabilidad aún no termina.