Brasil aprobó el jueves la venta de harina derivada del trigo transgénico HB4 desarrollado por la compañía argentina Bioceres, la cual señaló que aún esperará a que otros destinos de exportación autoricen al cereal modificado genéticamente para comenzar a vender la semillas del producto en Argentina.
La aprobación de parte de CTNBio de Brasil marca un hito para el trigo modificado genéticamente, en este caso tolerante a la sequía y al glufosinato. Cuando Argentina lo autorizó el año pasado, se convirtió en el primer país del mundo en hacerlo.
La decisión, dada a pedido de Tropical Melhoramiento Genético -socio de Bioceres en Brasil-, fue tomada a pesar de la oposición de la cámara de molinos de Brasil y permite, según una resolución oficial argentina, a la compañía argentina comenzar a vender sus semillas, aunque esta señaló que no lo haría de manera inmediata.
Brasil es el principal comprador de trigo de Argentina, que hasta fines de octubre vendió el 49,6% del total de sus exportaciones del 2021 de trigo de 8,4 millones de toneladas a su país vecino.
“La decisión fue hecha por una agencia técnica. Es importante ver qué es lo que el mercado brasileño quiere y parece que los consumidores de Brasil no quieren trigo transgénico”, dijo Gustavo Idígoras, titular de la cámara de exportadores de granos CEC.
Exportadores argentinos temen que la siembra de trigo transgénico en Argentina pueda ahuyentar a otros mercados internacionales que no lo hayan aprobado. En tanto, molinos cuestionan la demanda que harina hecha con cereal transgénico pueda tener y afecte su actividad.
Sin embargo, más allá de la alarma de algunos sectores, una fuente de Bioceres dijo a Reuters que a pesar de la decisión de CTNBio aún no comercializará las semillas en Argentina y que buscará obtener la aprobación de más destinos de exportación de trigo argentino.
En los diez primeros meses del año, además de a Brasil, Argentina le exportó 733.000 toneladas de trigo a Chile y 463.000 toneladas a Indonesia, según datos oficiales.
“Es un logro para Argentina”, dijo a Reuters una fuente del Ministerio de Agricultura.
“La biotecnología es parte del proceso por el cual Argentina va a tener mayor calidad y capacidad de producción y anteponerse a los avatares climáticos que plantea este momento el planeta”, señaló la fuente, que destacó que el titular de la cartera, Julián Domínguez, ha impulsado el proceso de biotecnologización.
Según Bioceres, en Argentina hay cerca de 55.000 hectáreas sembradas con su trigo HB4, gracias a convenios no comerciales con agricultores. Esa superficie será usada para producir semillas.
El titular de la cámara de la cadena de trigo argentino Argentrigo, Miguel Cané, dijo a Reuters que le parecía “bastante prudente” la decisión de Bioceres de pausar la venta de sus semillas hasta obtener la aprobación de más mercados internacionales. (Reporte de Ana Mano en Sao Paulo y de Maximilian Heath y Hugh Bronstein en Buenos Aires; Editado por Eliana Raszewski, Walter Bianchi y Jorge Otaola)
HOY ES UN GRAN DÍA ?? Brasil aprobó el trigo HB4, tolerante a la sequía. Desarrollo 100% argentino y resultado de dos décadas de trabajo de la Dra. Raquel Chan, @IAL_CONICET, @UNLitoral y Bioceres.
— Grupo Bioceres (@grupobioceres) November 11, 2021
Nos pone muy contentos llevar la #CienciaArgentinaAlMundo ? pic.twitter.com/Uwf1CHW99g
Fuente : Reuters